Protocolo de Seguridad y Sonido

Protocolo de Seguridad y Sonido

Protocolo de Seguridad y Sonido

¿Qué es y en qué consiste?

Es una intervención auditiva basada en la Teoría Polivagal de Stephen W. Porges. Está diseñada desde hace más de 20 años, para reducir la hipersensibilidad auditiva, mejorar el procesamiento auditivo, calmar el estado fisiológico y emocional, mejorar la conducta y la comunicación verbal, y optimizar la conexión social espontánea.

Es un protocolo de 5 horas de duración que puede durar desde mínimo 5 días (lo máximo que se puede escuchar cada día es 1h), hasta lo que sea necesario según cada caso. Es decir, al ritmo que cada día considere el Profesional que debe realizarse el Protocolo hasta completar las 5h de duración.

Utiliza una estimulación acústica alterada por ordenador para modular la banda de frecuencia transmitida a través de los auriculares. Mediante estas frecuencias, se modula la regulación neural de los músculos del oído medio. Estos músculos, influyen directamente en el estado fisiológico de nuestro sistema nervioso autónomo. Como consecuencia se proporcionan señales de seguridad a nuestro sistema nervioso, que es la base de la Teoría Polivagal y de una óptima regulación interna de nuestro organismo.

El sistema nervioso tiene que sentirse seguro y lo suficientemente confiado para no entrar en estados de autoprotección, hipervigilancia y defensa. Si nos encontramos en estados defensivos, nuestra homeostasis (equilibrio del medio interno), regeneración orgánica, aprendizajes, crecimiento y desarrollo se pueden ver desfavorecidos claramente por esta causa.

¿Cuándo utilizar el Protocolo de Seguridad y Sonido?

Normalmente esperamos a tener síntomas o patologías para ponernos en marcha y cuidar de nuestra salud. Cuando se nos ha diagnosticado una patología, el deterioro o adaptación ya hizo su proceso. Pero, ¿qué son las patologías?

En todas las patologías hay desregulaciones del sistema nervioso autónomo. Y por eso el SSP está indicado en todos los casos, ya que puede ayudar a mejorar claramente estas desregulaciones, excepto en el caso del trastorno bipolar, en el que todavía no está claro su uso.

Es cierto que hay patologías como la leucemia, una fractura ósea por trauma o cataratas en los ojos (por citar algunas), pero en todos los casos el sistema nervioso autónomo también está afectado, ya sea como origen o consecuencia.

La desregulación del sistema nervioso autónomo es más común de lo que creemos. Nuestra capacidad de autorregulación constante hace que no pensemos en ello, ya que este trabajo es subconsciente, además de ser automático.

Muchas veces la falta de atención a nosotros mismos, las rutinas cotidianas, el trabajo, los hijos, hacen que no escuchemos al cuerpo, cuando él, claramente, nos envía mensajes que deberían ser escuchados.

¿Cuales son algunos de estos mensajes que nos trasmite el cuerpo?

Irritabilidad emotiva y física, estreñimiento, insomnio, mala digestión, cefaleas, dolores músculo esqueléticos difusos, pérdida de equilibrio, cansancio constante, depresión, ansiedad, incapacidad de sentirse feliz, apatía, tensión alta, dificultad de relacionarse, dolores en cervicales, dorsales y lumbares, etc.

La lista se hace interminable cuanto más conocemos el cuerpo. Algo tan simple como una gastritis, puede esconder una fuerte desregulación autónoma. A esta desregulación le llamamos “estados fisiológicos desregulados”.

Cada vez más, en la literatura se escucha la terminología “estado fisiológico”, porque las últimas búsquedas científicas lo demuestran y porque el nuevo paradigma de salud está tocando a nuestra puerta.

El SSP es una de las “llaves maestras” para regular tu sistema nervioso autónomo y así, poder vivir una vida más plena, tranquila y regulada.

Beneficios & Resultados

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Regulación del Sistema Nervioso

¿Cómo se aplica el Protocolo de Seguridad y Sonido?

En la consulta del profesional o en casa, en un entorno tranquilo y seguro sin distracciones. Se escuchan las 5 horas del SSP en el orden establecido (aunque parezcan iguales no lo son) y de manera activa (prestando atención a la música y a las reacciones del cuerpo).

Todo ello facilitado por una aplicación digital de ILS a través de unos auriculares externos (no se recomiendan auriculares internos).